God Jul! = ¡Feliz Navidad!

Saludos de nuevo.
Antes de empezar el último día de trabajo del año y en la víspera de la vuelta a casa por Navidad, os escribimos unas líneas sobre alguna de las costumbres navideñas suecas que estamos aprendiendo:
– Si bien todos están de acuerdo en que noviembre es el peor mes por su oscuridad, frío y habitual lluvia, también todos coinciden en que diciembre es mucho mejor. Y lo es en parte porque suele empezar a nevar y la capa blanca que todo lo cubre refleja la austera iluminación callejera dando una sensación más luminosa. Pero resulta que este año aún no ha nevado de verdad. No tampoco ha hecho frío. Hasta ahora el clima es muy parecido al que solemos tener en una zona como la de Albacete. No obstante el ánimo general es más festivo y animado, hay muchas actividades organizadas en las ciudades y se respira un ambiente más alegre. En general creemos que la Navidad aquí empieza antes, pues a primeros de enero ya hay mercados navideños, iluminación y carteles en los que todo empieza por «Jul» (Navidad en sueco).
– Es festivo el día de Nochebuena, el día de Navidad y el día 26. Le llaman el fin de semana largo. Después es también festivo el 31 y el 1. Pero ahí suele terminar la Navidad, no hay Reyes.
– El portador de regalos y alegrías es Tomten (Papa Noel o Santa Claus). Y suele venir el día 24 a media tarde, en general «invitado» por algún familiar o incluso vecino. En teoría un Tomten es un enano, un gnomo, y casi todas las casa tienen su figurita en casa. Pero el abuelo de blanca barba y encarnada vestimenta cabalgando un trineo tirado por renos vive en la zona de la Laponia, entre Suecia y Finlandia. Quizá por eso aquí llega por el día y a España suele hacerlo esa noche, no?
– La luz juega un papel muy importante en estas fechas. Todas las casas tienen velas, lámparas en forma de estrellas o candelabros en las ventanas. Pudiendo tener varias explicaciones, la más formal es la tradición de encender una vela cada domingo de diciembre (adviento) para prender la cuarta el día de Navidad.
– También tiene mucho protagonismo la luz el día 13 de diciembre. Se celebra Santa Lucía (patrón de los ciegos y los oftalmólogos, por cierto) cuando muchos consideran el inicio de la Navidad en sí. Los niños se suelen disfrazar para ir al colegio a cantar canciones típicas y hacer galletas de gengibre (peparkakor). Es tradicional elegir una niña guapa y rubia a la que se le viste de blanco con una corona de luces en la cabeza. Esta será Santa Lucía.
– Aunque muchas casas ponen un árbol de Navidad (julgran) muy iluminado a primeros de diciembre, la tradición más clásica dice que el es día 22 o 23 cuando se corta un abeto por el día y se decora al caer la noche. Y se debe quitar el día 13 de enero tras haber bailado a su alrededor y comido chuches (godis).
– Por razones de diferencias entre las religiones católicas y protestantes lo que no es habitual es poner belenes. Se pueden encontrar en alguna tienda pero no es frecuente en las casas.
– Las celebraciones más habituales son el 24 de diciembre cuando se suelen juntar las familias a cocinar, comer el Julbord (ahora lo explico), esperar a Tomten y seguramente beber también. El 25 es también festivo, de resaca para unos, de disfrute de juguetes para otros y de reuniones familiares para la mayoría. El 26 es también festivo, inicio de rebajas (similar a USA). En Nochevieja es frecuente juntarse a comer-cenar con amigos y el que aguanta hasta las 12 de la noche tira petardos, cohetes o incluso fuegos artificiales en el centro de las ciudades. Nada de uvas pero si mucho alcohol.
– Comida: popular y tradicional varias cosas típicas. Para Lucía se hacen galletas de gengibre y unos bollos amarillos en forma de ocho con pasas. Las bebidas de Navidad son el glögg (vino caliente, aunque también lo hay sin alcohol, al que se le echa pasas y almendras) y el Julmus (similar a la cocacola). Y ¿qué es el Julbord que todos los restaurantes anuncian y hasta el Ikea ofrece como lo mejor de la Navidad? Pues para nuestros ojos es un buffet (todos los platos en una mesa a la que te acercas a servirte y puedes repetir cuanto quieras) con la comida más sueca: sil o aré que en distintas salsas, köttbullar o albóndigas, korv o salchichas, skinka o jamón dulce, patatas cocidas y huevos duros. Aparte se hacen unas ensaladas o guisos con patatas y cebolla sobre todo. Lo cierto es que los platos suelen ser los mismos siempre y es lo que en nochebuena se cocina en casa. Pero durante todo diciembre lo puedes encontrar en cualquier restaurante sueco, eso si a precios de unos 30-40€ pues «puedes repetir sin límite».
– Las actividades navideñas no tienen nada de especial ni sorprendente. Comidas con los compañeros de trabajo, conciertos y teatro (muchos para niños), mercados navideños en los que se venden desde galletas a artesanía, pistas de patinaje públicas… Lo más original en Suecia es juntarse casi 4 millones de suecos (casi la mitad de la población) delante de la tv el día 24 a las 15:00 para ver un corto del Pato Donald (Kalle Anka). Y lo que más está de moda: organizar toda la familia un viaje juntos a alguna zona del mundo más calurosa y celebrar la Navidad en familia pero sin frío!

FELIZ NAVIDAD Y PRÓSPERO 2014